Reflejo de ti mismo.

Algunas veces es bueno comenzar a hablar de algo directamente sin necesidad de indirectas ni acertijos complicados. Dicho esto, comenzare por decir que es muy fácil ver los defectos en las demás personas, es muy fácil decir lo que te molesta de los demás y mucho mas fácil etiquetar y dar opiniones acerca de ellas. Así, le doy un comienzo a lo que escribiré.

Uno puede ser critico y juicioso en torno a lo que viene a ser el mundo que nos rodea. Podemos etiquetar a los demás y hasta solemos etiquetar los sentimientos, pero ese ya es otro tema. Se que es muy fácil decir algo de los demás pero, cuando llega el turno de retrospectiva uno se llena de cobardía y huye por otro lado o simplemente tiende a irse por la negación. Solemos hablar de que la otra persona es esto o es aquello pero, no puedes hablar de que tu eres esto o aquello?

Antes de poder hablar de los demás debes saber de ti. Es sencillo decirle al otro que es inmaduro, por ejemplo, cuando no te ves a ti mismo. Primero que todo y antes que nada debo decir que generalmente las cosas que nos molestan en las demás personas suelen ser la reflexión de uno mismo, como un espejo, por ende,

lo que no te guste en otros seres es algo que debes superar contigo mismo y, antes de criticarlo, poder corregirlo en ti.

También hay casos de personas que no se ven a si mismas que critican a otra y esta otra que no acepta. El primer paso que hay que dar es: la "aceptación" de las cosas, si, es una cuestión medio confusa, pero debes aceptar las criticas de personas que no se ven a si mismos para que puedas verte a ti mismo. Siempre habrá alguien que te critique, que te diga esto o aquello, es ahí donde debes tomar dato y mirarte, aceptar lo que eres y que no, dado a que es muy fácil la "negación" y todo el mundo tiende a irse por ese camino.

En fin, ya hay algo en que pensar, es cuestión de cada uno aplicarlo o no. Aunque hay algo que si diré: Si vas a criticar a alguien primero mirate en el espejo para que tengas fundamentos de lo que estas hablando. No puedes pedirle a alguien que sea maduro cuando tu no lo eres, por ejemplo. Al fin y al cabo, lo que no te gusta en las personas, es lo que no haz podido superar en ti mismo.